EL PIANO
Su historia…
El cordófono más antiguo que inició la línea evolutiva del piano fue la cítara, un instrumento conformado por una tabla atravesada por una serie de cuerdas tensas que se pulsaban con el dedo, la uña o un objeto punzante. La cítara tuvo sus inicios en África y en el sudeste de Asia en la edad de Bronce.
Posteriormente fue creado el monocordio, un instrumento conformado por una única cuerda extensa que vibraba sobre una caja de resonancia de madera.
Éste fue utilizado por matemáticos como Pitágoras y Euclides para realizar sus estudios.
El siguiente en la lista fue el salterio, un instrumento similar a la cítara constituido por una tabla que tenía forma trapezoidal y unas cuerdas de diversos tamaños que podían ser pulsadas con los dedos o percutidas con palos. El modelo de esta tabla posteriormente influyó en el diseño de los primeros clavecines.
El órgano es un instrumento con un teclado que crea sonidos mediante tubos de diferentes longitudes, y que debe ser tocado con las manos y los pies. Éste tuvo su origen en Grecia.
El clavicordio surgió en Europa como una respuesta a las investigaciones que surgieron debido a las ansias de crear un instrumento cuyas cuerdas no estuvieran en contacto con los dedos del instrumentista. El mecanismo de este instrumento consistía en unas agujas metálicas llamadas tangentes que cuando eran accionadas por teclas hacían vibrar unas cuerdas, cuyo sonido era amplificado por una caja de resonancia considerablemente grande.
Posteriormente fue creado el clavecín, instrumento similar al clavicordio pero con un mecanismo diferente; Al presionar una tecla una púa de pluma de ganso llamada plectro que se encuentra dentro de una pieza de madera llamada martinete o saltador, eleva la cuerda punzándola.
Los primeros instrumentos de cuerda percutida fueron los dulcémeles y la zanfona que tuvieron sus orígenes en la Edad Media. Los primeros provinieron del santur, un instrumento tradicional persa.
En el siglo XVI Bartolomeo Cristofori construyó el pianoforte, un instrumento muy similar al piano moderno. El mecanismo de este instrumento consiste en macillos que cuando son accionados por las teclas rebotan sobre las cuerdas dejándolas vibrar libremente. Este mecanismo que resolvía los problemas que tenían el clavicordio y el clavecín por no rebotar sus púas, sirvió como modelo para la construcción del piano moderno. Además el pianoforte no producía sonidos estridentes y metálicos como sus antecesores y permitía hacer dinámicas.
Cuando el pianoforte se dio a conocer Gottfried Silbermann comenzó a crear modelos similares a los de éste pero con una diferencia; Inventó el precursor del pedal llamado una corda que le permitía al intérprete lograr un sonido más suave.
El piano actual tiene características similares a los instrumentos creados por estos dos constructores, sin embargo sus materiales fueron optimizados, el registro fue aumentado, y se mejoró el diseño.
lunes, 20 de abril de 2009
¿QUÉ HUELLAS CREA LA MÚSICA EN LOS NIÑOS?
El cerebro de los seres humanos cumple dos funciones imprescindibles para los procesos creativos; Recordar las experiencias vividas y el conocimiento adquirido, e imaginar nuevos elementos y situaciones.
Los niños tienen una capacidad para recordar eficiente y rápida debido a que la parte fundamental del proceso de aprendizaje se da a esta edad. Lo que vivimos durante la niñez marca notable e irreversiblemente nuestra vida; Nuestra lengua materna crea estructuras gramaticales que nos permiten aprender otras lenguas, gran parte de los elementos culturales que definirán nuestro estilo de vida son definidos, y nuestro comportamiento social es moldeado.
Por esta razón la información que le es proporcionada a un niño se vuelve un arma delicada para los padres y los educadores que hay que saber manipular de la forma correcta. De lo contrario podrían afectar el futuro del niño de una forma negativa.
La música es un arte que envuelve la lógica y la sensibilidad y que estimula al cerebro a recordar y a crear. Ésta puede ser una herramienta eficiente para el proceso de aprendizaje mencionado anteriormente al tocar estos dos puntos de la mente del niño.
Cuando una canción es repetida constantemente a un niño, su cerebro guarda diferentes tipos de información; Acepciones, estructuras gramaticales y estructuras musicales. Toda esta información le permitirá reproducir estos sonidos, ya sea hablando o cantando, y este es el primer paso para construir las bases de la comunicación que le permitirán hacerle entender sus pensamientos a los demás.
Además la capacidad de mezclar todos los diferentes tipos de información acumulada le permitirán crear nuevas imágenes y pensamientos, elementos conspicuos en el desarrollo de la personalidad.
La otra característica mencionada, la sensibilidad, también es una parte fundamental en el proceso educativo de los seres humanos. Cuando una persona tiene acceso a alguna de las ramas artísticas desde pequeño el germen de la visión del mundo que desarrollará posteriormente estará inmerso en un nivel de sensibilidad superior que le permitirá percibir su entorno intensamente y crear relaciones fuertes con los seres que lo rodean.
Las huellas que la música crea en los niños marcan notablemente la personalidad de éstos, por eso es importante permitirles tener un acercamiento a este arte desde una temprana edad.
El cerebro de los seres humanos cumple dos funciones imprescindibles para los procesos creativos; Recordar las experiencias vividas y el conocimiento adquirido, e imaginar nuevos elementos y situaciones.
Los niños tienen una capacidad para recordar eficiente y rápida debido a que la parte fundamental del proceso de aprendizaje se da a esta edad. Lo que vivimos durante la niñez marca notable e irreversiblemente nuestra vida; Nuestra lengua materna crea estructuras gramaticales que nos permiten aprender otras lenguas, gran parte de los elementos culturales que definirán nuestro estilo de vida son definidos, y nuestro comportamiento social es moldeado.
Por esta razón la información que le es proporcionada a un niño se vuelve un arma delicada para los padres y los educadores que hay que saber manipular de la forma correcta. De lo contrario podrían afectar el futuro del niño de una forma negativa.
La música es un arte que envuelve la lógica y la sensibilidad y que estimula al cerebro a recordar y a crear. Ésta puede ser una herramienta eficiente para el proceso de aprendizaje mencionado anteriormente al tocar estos dos puntos de la mente del niño.
Cuando una canción es repetida constantemente a un niño, su cerebro guarda diferentes tipos de información; Acepciones, estructuras gramaticales y estructuras musicales. Toda esta información le permitirá reproducir estos sonidos, ya sea hablando o cantando, y este es el primer paso para construir las bases de la comunicación que le permitirán hacerle entender sus pensamientos a los demás.
Además la capacidad de mezclar todos los diferentes tipos de información acumulada le permitirán crear nuevas imágenes y pensamientos, elementos conspicuos en el desarrollo de la personalidad.
La otra característica mencionada, la sensibilidad, también es una parte fundamental en el proceso educativo de los seres humanos. Cuando una persona tiene acceso a alguna de las ramas artísticas desde pequeño el germen de la visión del mundo que desarrollará posteriormente estará inmerso en un nivel de sensibilidad superior que le permitirá percibir su entorno intensamente y crear relaciones fuertes con los seres que lo rodean.
Las huellas que la música crea en los niños marcan notablemente la personalidad de éstos, por eso es importante permitirles tener un acercamiento a este arte desde una temprana edad.
lunes, 2 de marzo de 2009
La música en las culturas.
La música es una de las múltiples ramas del arte, y como tal posee diversas formas de lenguaje, es decir, al tomar forma como herramienta expresiva no es homogénea.
Esto se debe a la diversidad del pensamiento y a las múltiples costumbres que se engendran desde una temprana edad en cada ser humano y se transforman mediante el aprendizaje y las vivencias.
La personalidad está moldeada hasta cierto punto por la cultura que envuelve al ser que la posee, la autonomía es un disfraz creado para alimentar el ego de los seres humanos. Cuando nos creemos únicos pensamos que somos importantes y nos ponemos en el tope de la jerarquía que rige el planeta. ¿Pero hasta que punto es cierto esto? Estamos sujetos a reglas que en la mayoría de los casos son absurdas, pero que ayudan a disminuir, o por lo menos a controlar los problemas interminables que crea la sobrepoblación. Es simplemente utópico desarrollar un mundo en donde todos los seres estén satisfechos con su entorno, por eso son necesarios los paradigmas, los preceptos, la filosofía, la religión y las culturas. Sin estos elementos creados por el hombre para su beneficio las numerosas preguntas sin respuesta nos enloquecerían. Cegados desde pequeños por unas metas absurdas y cuadriculadas mantenemos nuestra mente y nuestro cuerpo ocupados en un plano que no comprendemos, en resumidas cuentas, matamos el ocio, el tedio y la locura causados por la incomprensión mediante actividades compulsivas, y en la mayoría de los casos inservibles.
Por eso para conocer medianamente a alguien es necesario saber un poco de donde proviene, cuales son sus creencias y como concibe el mundo, aunque sea de una forma muy superficial, porque es bien sabido que es difícil inclusive conocerse a sí mismo.
Mientras más conocemos una cultura más acceso tenemos a los seres que la conforman, y una de las expresiones de ésta es la música, mediante este arte pueden entreverse elementos conspicuos de la visión del mundo que ésta conlleva. Por esto la cultura es indispensable para la comprensión de la música.
Las diferencias teóricas y prácticas entre todos los tipos de música que abarcan el planeta parecen ser enormes si miramos a través de una lupa, pero si nos alejamos un poco de las minuciosidades podremos comprender que la parte esencial que las conforma es similar en cada una de ellas.
La complejidad de nuestro pensamiento es una creación más de nuestra mente inquieta, la finalidad de nuestra existencia es simple y los comportamientos realizados para llegar a ésta son distracciones, por eso todas las formas de expresión, incluida la música sólo podrán ser comprendidas cuando se retorne a la unidad de las culturas.
Esto se debe a la diversidad del pensamiento y a las múltiples costumbres que se engendran desde una temprana edad en cada ser humano y se transforman mediante el aprendizaje y las vivencias.
La personalidad está moldeada hasta cierto punto por la cultura que envuelve al ser que la posee, la autonomía es un disfraz creado para alimentar el ego de los seres humanos. Cuando nos creemos únicos pensamos que somos importantes y nos ponemos en el tope de la jerarquía que rige el planeta. ¿Pero hasta que punto es cierto esto? Estamos sujetos a reglas que en la mayoría de los casos son absurdas, pero que ayudan a disminuir, o por lo menos a controlar los problemas interminables que crea la sobrepoblación. Es simplemente utópico desarrollar un mundo en donde todos los seres estén satisfechos con su entorno, por eso son necesarios los paradigmas, los preceptos, la filosofía, la religión y las culturas. Sin estos elementos creados por el hombre para su beneficio las numerosas preguntas sin respuesta nos enloquecerían. Cegados desde pequeños por unas metas absurdas y cuadriculadas mantenemos nuestra mente y nuestro cuerpo ocupados en un plano que no comprendemos, en resumidas cuentas, matamos el ocio, el tedio y la locura causados por la incomprensión mediante actividades compulsivas, y en la mayoría de los casos inservibles.
Por eso para conocer medianamente a alguien es necesario saber un poco de donde proviene, cuales son sus creencias y como concibe el mundo, aunque sea de una forma muy superficial, porque es bien sabido que es difícil inclusive conocerse a sí mismo.
Mientras más conocemos una cultura más acceso tenemos a los seres que la conforman, y una de las expresiones de ésta es la música, mediante este arte pueden entreverse elementos conspicuos de la visión del mundo que ésta conlleva. Por esto la cultura es indispensable para la comprensión de la música.
Las diferencias teóricas y prácticas entre todos los tipos de música que abarcan el planeta parecen ser enormes si miramos a través de una lupa, pero si nos alejamos un poco de las minuciosidades podremos comprender que la parte esencial que las conforma es similar en cada una de ellas.
La complejidad de nuestro pensamiento es una creación más de nuestra mente inquieta, la finalidad de nuestra existencia es simple y los comportamientos realizados para llegar a ésta son distracciones, por eso todas las formas de expresión, incluida la música sólo podrán ser comprendidas cuando se retorne a la unidad de las culturas.
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